Sábado 5 de Noviembre de 2011

Hoy es, Sábado noche...
¿cómo me encuentro yo? Bueno, mal no estoy, estoy viendo ''Sex and the City'' me he acabado de terminar una típica galleta con trozos de chocolate, llevo ya siete cigarrillos, bueno, mejor dicho ocho cigarros y 3 cervezas....
pero no es esto de lo que quiero hablar.
Ayer, mi ex me dijo que este fin de semana teníamos que quedar para salir de fiesta pero, no me he atrevido, por lo que le he dicho que no puedo hasta, básicamente el mes que viene...
Seguramente, es porque me da miedo el hecho de que, a un mes de comenzar el 2012, me siga encontrando solo y sin nadie que sepa llenar el vacío en el que se encuentra una persona al estar soltero/a.
o ¿puede caber la posibilidad de que, al no saber que rumbo seguir (después de un año de soltería) , y con un gran alto porcentaje de sensibilidad, mi vida amorosa se encuentra estancada en cómo era mi vida antes de conocer a mi ex?
Bueno, no estoy en estado de llegar a ninguna conclusión concreta por lo que, no recomiendo a nadie, el estar casi abandonado (amorosamente, o no) y estar a solas en casa, un sábado noche con, unas cuantas cervezas y, triste.
Así que, si es Sábado y estáis solos, llamar a alguna persona que, moralmente, se encuentre con, cuando reciba una llamada, una persona con la que pueda conversar.

Lluvia Nocturna

Hoy, Madrid se encuentra bajo una noche lluviosa. Hace un momento, estaba mirando por la ventana fumando un cigarrillo y he pensado, ¿Porqué ahora?
A ver, el pasado día 31, estuve hablando con, sorprendente mente con mi ex, y decidimos vernos esa misma noche, ya que íbamos a salir por la misma zona. Si. Al final nos vimos pero cada uno fuimos a un sitio distinto.
Hoy, al mirar como llovía, no sé si estoy preparado para mantener una relación de amistad.
¿Puede el odio ser sustituido por amistad?
Una persona puede, de la noche a la mañana, decidir qué va hacer, ya sea, ir de compras, ir a correr o, simplemente cambiar de idea y hacer completamente lo contrario. Pero, cuando tienes un pasado en común con alguien, el cambiar de opinión puede ser una catástrofe.
Me gustaría poder pensar que, como hoy, cuando deje de llover el agua de las aceras caerá por alguna alcantarilla y se perderá. Así me gustaría que, mis pensamientos, desaparecieran de mi mente.
Ojalá pronto, llegue la calma.
Ojalá pronto, la lluvia que inunda mis ojos, se escapen o, simplemente me abandonen.